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A través de sus redes sociales, Zulinka Pérez, hija del legendario merenguero dominicano Rubby Pérez, compartió un emotivo video en el que su padre reflexiona con profunda fe sobre su relación con Dios, dejando un poderoso mensaje espiritual que hoy cobra mayor significado tras su repentino fallecimiento.
El video fue publicado luego del homenaje musical "Rubby Pérez, Infinito", una velada llena de sentimientos en la que artistas, familiares, amigos y fanáticos celebraron la vida y el legado del intérprete de "Buscando tus besos". El evento se tornó aún más simbólico tras la tragedia ocurrida en la discoteca Jet Set, donde colapsó el techo durante una de sus presentaciones, dejando un saldo fatal de más de 200 personas, incluyendo al propio Rubby Pérez.
En la entrevista rescatada por su hija, se escucha al artista hablar con serenidad, fe y esperanza:
"Cuando tú le pides a Dios algo con fe, de verdad, y le abres tu corazón, Él te dice: tranquilo, no hay problema, hecho está lo que tú quieres", declaró Rubby, explicando que esa frase —“hecho está”— es una referencia directa a las últimas palabras de Jesús en la cruz:
“Consumado es, terminado está, se cumplió todo”.
Con voz pausada y convicción firme, Rubby también compartió una poderosa reflexión sobre su vida espiritual y los momentos en que sentía que las cargas eran demasiado pesadas para sobrellevarlas solo:
"Cuando estoy en mi habitación solo, que es el único lugar donde puedo estar conmigo, yo le digo: ‘Señor, tengo un problemita que tú sabes que es demasiado para mí. Te lo voy a dejar a ti, y mañana tú me dices cómo voy a resolver esa vaina, porque yo no puedo’", expresó con franqueza.
Las palabras de Rubby Pérez, ahora viralizadas, han conmovido a miles de personas que lo recuerdan no solo como uno de los grandes del merengue, sino como un hombre profundamente humano y creyente, que enfrentó la vida con fe, humildad y una sonrisa que siempre lo acompañó en el escenario.
El homenaje “Rubby Pérez, Infinito” no solo fue un tributo a su carrera artística, sino también a su legado espiritual, a su forma de entender la vida y a su testimonio como hombre que, más allá de los aplausos, encontraba su fuerza en la fe.