Internacional
El gobierno de Estados Unidos se presentó ante la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York para respaldar el pedido de Argentina de suspender la transferencia de acciones de la petrolera YPF a los beneficiarios de un fallo judicial por US$16.000 millones, derivado de la expropiación de la compañía.
La Justicia estadounidense suspendió temporalmente la orden de transferencia de acciones emitida por la jueza Loretta Preska y evaluará antes de fines de julio si mantiene esa medida, a la espera de resolver la apelación presentada por Argentina.
En su intervención, el Departamento de Justicia enfatizó la importancia de respetar los principios de inmunidad soberana, subrayando que el caso tiene “implicancias significativas para la política exterior de EE.UU.” y podría afectar cómo se tratan bienes estadounidenses en tribunales internacionales.
Entre los argumentos presentados por EE.UU. destacan que los bienes de estados extranjeros gozan de inmunidad absoluta ante medidas de ejecución, y que no existe intención legislativa de eliminar esa protección para bienes ubicados en el extranjero.
Argentina sostiene que, sin la suspensión, podría sufrir daños irreparables, al perder el control de las acciones de YPF aunque gane la apelación. Por otro lado, los demandantes —entre ellos los fondos Burford y Eton Park— se oponen a la suspensión, al igual que el fondo Bainbridge, otro acreedor que reclama la entrega de acciones por una sentencia relacionada a bonos de 2001.
El caso continúa su trámite judicial, con el tribunal evaluando el alcance de la inmunidad soberana y el impacto en las relaciones internacionales entre Argentina y EE.UU.